4.2. Evaluación heurística
La evaluación heurística es el método de inspección por excelencia en el entorno profesional, puesto que es de los más utilizados. Para llevarla a cabo se toman en consideración los principios establecidos por las disciplinas de interacción persona-máquina, llamados principios heurísticos. De este modo, se trata de buscar resultados cualitativos que permitan enfatizar los problemas de usabilidad que presenta un sistema.
Esta búsqueda se puede hacer evaluando la totalidad de una interfaz o solo secciones concretas. Además, se puede abordar según diferentes niveles de profundidad que entrarán en mayor o menor detalle, según los objetivos y el momento de la investigación y evaluación que se esté llevando a cabo (queremos evaluar un proceso completo, unas tareas concretas, una sección, toda la interfaz, etc.).
La evaluación heurística se puede llevar a cabo en diferentes etapas de un proyecto:
- En fases iniciales: permiten verificar y buscar puntos de mejora de prototipos e interfaces todavía no implementados.
- Durante el desarrollo: permiten localizar y corregir errores antes de la publicación o lanzamiento de un producto y/o servicio.
- En productos o servicios ya existentes.
Principios heurísticos
Las ocho reglas de oro de Ben Schneiderman
El año 1987 Bien Schneiderman presentó las ocho reglas de oro para conseguir una interacción correcta en una interfaz. Estas ocho reglas se han erigido como las reglas básicas que hay que tener en cuenta en el momento de diseñar la interfaz de un sistema. Así pues, son la inspiración inicial que se ha visto reforzada con las aportaciones de otros expertos del sector, hasta llegar a las decenas de listas de heurísticas y subheurísticas existentes en la actualidad.
Aun así, todas ellas toman como raíz las ocho reglas que a continuación listamos:
- Lucha por la coherencia y la consistencia.
- Crea atajos y accesos directos para las personas usuarias frecuentes.
- Ofrece retroalimentación (feedback).
- Diseña el diálogo para mostrar trabajo pendiente.
- Ofrece una gestión sencilla de los errores.
- Permite una recuperación de acciones fácil.
- Soporta el control por la persona usuaria.
- Reduce la carga de memoria reciente en la persona usuaria.
10 principios de Nielsen
A pesar de la existencia de diferentes listas, los diez principios de Nielsen, extraídos en 1994, son uno de los conjuntos más conocidos, especialmente en el diseño de productos y servicios en la web.
- Visibilidad del estado del sistema.
- Adecuación entre el sistema y el mundo real.
- Libertad y control por parte de la persona usuaria.
- Consistencia y estándares.
- Prevención de errores.
- Reconocimiento antes que recuerdo.
- Flexibilidad y eficiencia en el uso.
- Diseño estético y minimalista.
- Ayuda a las personas usuarias a reconocer y diagnosticar los errores y a recuperarse.
- Ayuda y documentación.
Consideramos que hay que conocer los principios de Nielsen por la importancia que tienen dentro de la disciplina, puesto que el resto de listas existentes no aportan principios radicalmente diferentes, sino que suelen ser versiones adaptadas en función de los productos, sistemas y servicios que hay que analizar. Así pues, estos principios son un buen punto de partida para realizar una evaluación heurística. En la unidad didáctica del bloque de referencias hay ejemplos ilustrativos de cada uno de los principios.
Los principios heurísticos tienen una gran importancia y utilidad, pero debemos recordar que en ningún caso sustituyen evaluaciones de usabilidad con usuarios.
Dicho de otro modo, para llevar a cabo una evaluación de la usabilidad completa y realista es necesario servirse de un conjunto de métodos, algunos de los cuales involucran usuarios y otros, no.
Ejercicio
Visitad un producto o servicio interactivo que uséis habitualmente. ¿Reconocéis los diferentes principios en el diseño de la interfaz? ¿Consideráis que os facilitan la navegación? ¿Encontráis estos principios en diseños y artefactos que usáis en el «mundo real»?